Té blanco e insomnio

El té blanco contiene, aunque en menor medida respecto de otros tés, teína. La teína es una sustancia alcaloide, considerada como un estimulante menor. Esta actúa sobre el sistema nervioso central, sobre el sistema respiratorio y sobre el sistema urinario.

Cuando bebes té blanco en exceso, la teína que contiene estimula al cerebro para que se mantenga alerta, reduce la sensación de cansancio y fatiga; así como también incrementa la frecuencia respiratoria y la diuresis. Todos estos efectos de la teína provocan insomnio y falta de sueño, lo que te lleva a dormir mal y descansar poco.

Por ello, para que puedas aprovechar las propiedades del té blanco, minimizando los efectos de la teína sobre el sueño, debes tener en cuenta ciertas sugerencias:

• No dejes reposar el saquito de té blanco o sus hierbas en el agua, por mucho tiempo. De esta forma te aseguras de que pasará poca cantidad de teína al agua.
• No bebas más de 3 tazas al día.
• No bebas té blanco justo antes de irte a dormir.

Un consumo elevado de teína y cafeína (más de 350 mg/día) puede provocar grandes problemas de salud, incluso su adicción. Por ello, no sólo controla el consumo de té blanco, sino también el de cualquier otro tipo de té, café, chocolate y/o cacao. Todas estas bebidas y alimentos contienen cafeína, teína u otra sustancia similar.

Recuerda también que, si sufres de hipertensión arterial debes controlar su consumo.