¿Té verde y yerba mate? Una buena combinación de energía y propiedades
Ideal para las mañanas y potencia
¿Se te había ocurrido alguna vez mezclar yerba mate y té verde? Pues puede llegar a ser una excelente idea. Ambas infusiones pueden potenciarte mutuamente, dándose una a otra propiedades que la otra quizás no tiene en tanta dimensión. ¡Lee la nota y descubre más al respecto!
La yerba mate es una de las hierbas más populares del sur de Sudamérica. De consumo más que habitual en Uruguay, Paraguay, Argentina y Brasil, esta infusión es una cuestión social en los países citados.
El té verde, si bien no tiene tanto apego cultural en el mundo occidental como en sí en Asia, no deja de ser una bebida cada vez más consumida en todas partes por sus gratas propiedades. ¿Y si las combinas a ambas? Pues puede llegar a ser una excelente idea. Así, tendrás una auténtica bebida rica en muchísimas sustancias.
La primera cosa que obtendrás a través de esta combinación es un genial energizante. No sólo el té verde tiene contenido de cafeína, sino que también lo tiene la yerba mate. Así, ya tendrás una excelente bebida para cargar energías por las mañanas, resultando un gran elemento en tu desayuno.
Pero, además, tienes que tener en cuenta que la yerba mate no es tan antioxidante, por lo cual se verá beneficiada con esta adición que le significará el té verde, sin apelar además a las otras cuantiosas propiedades que tiene este té. La yerba mate te dará potasio, magnesio y manganeso. Y saciedad, ideal para no tener hambre.
Por eso mismo, combinar ambas puede llegar a ser una excelente idea de cara a tener una infusión súper completa, energizante, saciante y anti oxidante. Poca cosa, ¿no?
Algunas ideas para preparar té verde con yerba mate
Cuando prepares tu habitual tetera de té verde, añade también un par de cucharadas de yerba mate al infusor. Seguramente la infusión tomará un aspecto más verdoso y tendrá un sabor más amargo y astringente. Es natural, pues estas son características inherentes a la yerba mate.
Si ya quieres experimentar un poco más, no dudes en añadir algunas hierbas como el cedrón, la manzanilla o la menta. Si te gustan los cítricos, piel de naranja o de limón también irán de maravillas, siempre que la quieras consumir caliente.
¿Te animas a un té verde con yerba mate, pero fríos? Pues es mucho más fácil de lo que pensabas. Coloca una buena cucharada de té verde y dos generosas de yerba mate por litro de agua en un recipiente. Añade agua a unos 80 grados y deja enfriar. Incorpora el zumo de dos limones, mucha menta fresca y hielo. ¡Obtendrás una bebida refrescante sin igual!
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